Si, hoy hemos dado comienzo al curso ciclil Patxi y yo. Nos hemos "desayunao" una preciosa y descansadísima rutita mañanera. Esto es, creo que hemos gastado más fuerzas charlando sin parar durante todo el recorrido que dándole a los pedales. Hemos vuelto a batir el récord, 52 km en 6 horas. Pero no la cambio ni en sueños, por una de esas que de lo único que te da tiempo es de tragar polvo y mirar la rueda del que tienes delante para no caerte, como por ejemplo los nutridos grupos que hoy nos han ido pasando y cruzando a ratitos. Hemos paseado a gusto, fresquitos, con el aire en la cara, hablando de mil cosas, filosofía, deportes, política, familia, por supuesto de bicicletas y en Sevilla para recuperar saliva y sudores, nos acompañamos de varias y hermosas rubias muy espumosas, las cuales fueron ingeridas convenientemente. La última, una Voll-Damm de barril en la calle García de Vinuesa nos supo a gloria. Con esas y siendo ya casi las tres de la tarde, ciclando por el fantástico carril bici de nuestra preciosa Sevilla, hasta la parada del metro, el cual nos subió raudo y veloz hasta el aljarafe sevillano donde vivimos. Por cierto que las malas lenguas le han dado por llamarle el centímetro, por lo pequeñito de sus vagones, pero no importa, ya irá creciendo, aún es joven.
Bueno, pues hasta aquí el relato de nuestra primera rutita ciclera, que este año promete ser fecunda y disfrutona hasta límites insospechados. Los fanáticos de la bici, no seáis tontos y no os perdáis ninguna de las salidas que ya missssmo vamos a colgar en este blog.
Por cierto os adelanto que la primera ruta senderil va a ser dentro de dos semanas y que por clamor general? será a nuestra queridísima Sanlúcar. La manzanilla de nuestra tierra atrae poderosamente a estos falsos llanos ¿por qué será?.
Saludos y abrazos a todos-as.
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